Por el Gringo Ceballos
Especial para NOTICIAS DEL ESTERO
Central Córdoba sigue viviendo su mejor momento del año y se sacó de encima a Barracas con un 2 a 1. El equipo de De Felippe sigue vivenciando una metamorfosis virtuosa en lo futbolístico y los números lo están avalando en las tablas.
Un gordo de traje y con aire acondicionado programó el partido en un horario inhumano para estas latitudes. Se jugó con 38 grados y los jugadores lo sufrieron más que nadie. En ese contexto, el Ferroviario mostró mejores intenciones que un Guapo preocupado en proteger su valla más que otra cosa. Insúa propuso un 5-4-1, intentando no dejarle resquicios a un conjunto santiagueño que se está acostumbrando a dañar por afuera.
Los 11 de Don Omar ya salen de memoria y su trabajo en la semana cada vez se nota más. Prolijidad en el manejo con Vázquez, Atencio y Florentín, los 3 con buen pie y buscando pases verticales, no llenar las estadísticas de pases. La aceleración viene con Godoy y Angulo por las bandas, muy bien apoyados por Meli y Barrios, dos laterales que a veces toman callejones más interiores (made in Guardiola). Central distrae por dentro, profundiza por fuera y busca finiquitar en el corazón del área; a veces no terminan bien las jugadas, pero lo intenta siempre.
Si los dos goles del Ferroviario no son los mejores de la fecha hay que dejar de mirar la TV. El primero de Varaldo tras una estupenda jugada colectiva, culminada con un desborde y asistencia de la “Perla Negra” Angulo. ¿Qué decir del segundo? Hay que cerciorarse si el gol lo hizo Meli o Marcelo, el eximio lateral izquierdo brasileño. El que pagó la entrada salió ganando plata después de ver esos dos golazos.
En el 2T Central tenía todo controlado, los últimos 15 lo jugó con línea de 5 y expuso las deficiencias ofensivas de la visita. El penal del cierre no asustó a nadie porque ya no quedaba tiempo. Cuando Ramírez pitó el final, la gente bañó de aplausos a un equipo que hizo un esfuerzo descomunal desde lo físico y que sigue ilusionando por su presente futbolístico. Ganó 4 al hilo, ni los grandes elencos porteños lo lograron este semestre. ¡Que no se corte!