Por el Gringo Ceballos
Especial para NOTICIAS DEL ESTERO
Comenzó el año futbolístico para un Central Cordoba que tendrá varios frentes que atender: los torneos Apertura y Clausura de la Liga Profesional, la siempre apetecible Copa Argentina, la posibilidad de sumar una nueva estrella con la Supercopa Argentina y aquella quimera de disputar la Copa Libertadores, que en este 2025 se hará realidad, son los objetivos a corto y mediano plazo del Ferroviario. A esta larga travesía se la empezó con el pie derecho. Un ajustado 1 a 0 ante el recién ascendido Aldosivi, para engrosar la paternidad ante los marplatenses y lograr 3 puntos que siempre vienen bien para inflar el promedio.
Gran acompañamiento del público ferroviario, que se reencontró con la negra y blanca después de la consagración en Copa Argentina. Otra vez a familiarizarse con un plantel renovado y que tuvo en cancha desde el inicio a Rivero, Florentín y Angulo como sobrevivientes de la temporada pasada. Galván regresó al club y es un viejo conocido. El resto cumplió, siendo Moyano -lateral derecho-, Glaby -volante central- y Verón -el 10-, los que tuvieron mejor rendimiento.
En el 1T se vio a un Central bastante prolijo con la pelota, pero también previsible y por ello le costó llegar con claridad al arco de Carranza. Aldosivi cubrió bien los espacios hacia atrás y cerró todos los caminos hacia su valla. El conjunto santiagueño inquietó con remates de media distancia. Estuvo bien anulado el gol de García (por mano previa al remate) y eso trajo alivio para un equipo que tuvo en Cufré su punto más débil en defensa (se lo notó con falta de ritmo).
En el 2T Verón se perdió un mano a mano de entrada y después fue todo del Tiburón. Manejó con mas criterio el balón y acercó peligro hacia el arco de Aguerre. Los ingresos de Barrera y Cabral le dieron mas frescura al ataque santiagueño, y cerca del último cuarto de hora Verón se tomó revancha y de zurda la coló abajo. El elenco de Yllana lo fue a buscar, pero Central estuvo muy cerca de dañarlo en algunas contras. 1 a 0 y a otra cosa.
El inicio del Apertura tendrá un ritmo frenético, se jugará muy seguido y no habrá tiempo para trabajar. Las piezas deberán ensamblarse en los partidos. El hecho de ganar facilita todo. Además, detrás del armado está un entrenador siempre sobrio, tanto en las victorias como en las derrotas. Está acostumbrado a arreglárselas con poco. Nadie mejor que él para timonear este barco. La embarcación ferroviaria ya zarpó; hacia el noroeste se divisa una vela, esa vela tiene unos colores conocidos, se aproxima Atlético Tucumán.